El 108 se ha considerado durante mucho tiempo un número sagrado en el hinduismo y el yoga. Puede que hayas leído que la gente hace 108 saludos al sol (Surya Namaskar) en el equinocio de primavera, o que tienen un mala con 108 cuentas. Este número está tan cargado de connotaciones que en la India se le llama “Shri 108”. Indicando el “Shri” en sánscrito “irradiación de luz”, “gracia”, “belleza”, “riqueza”, “prosperidad”, y que al final se ha convertido en un apelativo semejante al “Mister” inglés o al “Don” en castellano.
Su uso ha proliferado en todos los aspectos relacionados con la religión o la cultura en Asia. Por ello no nos extraña encontrarnos con referencias constantes al 108.
Índice del contenido
Hay 108 cuentas en un mala
Tradicionalmente, los mala -cuentas de oración- se presentan como una cadena de 108 cuentas (más una para la «cuenta del gurú», alrededor de la cual las otras 108 cuentas orbitan como planetas alrededor del sol). El mala se utiliza para contar mientras se repite un mantra, como el rosario universal. De acuerdo con la tradición hinduista y budista, repetir 108 veces un pensamiento lo hará realidad.
Estas cuentas se utilizan tradicionalmente como herramienta de meditación, en la que repites un mantra mientras tocas cada cuenta con los dedos hasta terminar el mala. Para meditar con un mala, tienes que sentarte cómodamente con los ojos cerrados, respira profundamente unas cuantas veces y establece una intención. Si tienes un mantra para esta práctica, puedes cantarlo en voz alta o en silencio. Sujeta el mala en la mano derecha, colocado entre los dedos corazón e índice. Empieza con la cuenta grande del centro, a menudo llamada «cuenta gurú», y utiliza el pulgar para contar cada cuenta más pequeña. Tira del mala y acércalo a ti mientras recitas tu mantra. Hazlo 108 veces hasta que llegues de nuevo a la cuenta del gurú.
Otros citan otras razones por las que el mala tiene 108 cuentas. El Colectivo Mala señala que algunos creen que hay 108 etapas en el viaje del alma humana, mientras que otros asocian la posibilidad de la iluminación con hacer sólo 108 respiraciones al día en meditación profunda. Otros diseñadores de malas han enseñado que el número 1 representa a Dios, el universo o tu propia verdad más elevada; el 0 representa el vacío y la humildad en la práctica espiritual; y el 8 representa el infinito y la intemporalidad.
Matemáticas y 108
Los famosos matemáticos de la cultura védica consideraban que el 108 era el número de toda la existencia. Este número también relaciona el sol, la luna y la tierra: la distancia media del sol y la luna a la tierra es 108 veces sus respectivos diámetros.
108 es 3 elevado al cubo multiplicado por el 4. Si en Matemática Sagrada el número 3 representa el Triplo Logos, o las Esencia Divina, y también la Luz, y el 4 el reino de la Unión, y del Karma, simboliza entonces, la Luz Divina derramándose por toda la Naturaleza.
En la división de la circunferencia en 360 grados, el ángulo que forman los lados de un pentágono es justamente 108. Si el Pentágono es el símbolo por excelencia de la Mente o del Hombre Cósmico, el 108 puede ser una forma de significarlo.
Una propiedad matemática intrínseca e inmutable es que 108 es igual a 9 x 12. Recordemos que el 9 es el número más alto de toda la secuencia y es la suma de 1 + 8. De vuelta a la astrología 9 son las particiones del Navamsha (literalmente significa “novena división”) del zodíaco, en donde existen, como no, 12 signos. Y en la astronomía hindú 9 es el número de planetas, representados en un cuadrado de 3 casillas a cada lado, con en sol en el centro y los otros 8 alrededor (Luna, Mercurio, Venus, Marte, Júpiter, Saturno, Râhu y Ketu (de nuevo 1 + 8).
Deseos terrenales
En el budismo, se cree que existen contaminaciones o «deseos terrenales» que los seres humanos experimentan. Se dice que hay 108 de estos vicios por los que pasamos durante nuestro tiempo en la tierra. Entre ellas se encuentran experiencias como la arrogancia, la obsesión y la violencia. Todo ser humano experimenta estos deseos terrenales como un medio para la iluminación. Se cree que para librarse del sufrimiento y alcanzar la iluminación, hay que liberarse de todos estos deseos terrenales.
108 Pithas y Upanishads
Las pithas son lugares sagrados que se consideran los asientos de la deidad y se asocian con diversas partes del cuerpo de la deidad. Estos lugares sagrados están repartidos por toda la India, y todos están situados cerca de una masa de agua que se cree que está imbuida de la energía de la diosa. Las 108 pithas son importantes lugares de peregrinación para los miembros de las sectas Shakti del hinduismo.
Las pithas fueron creadas a partir de un mito de origen que hace referencia al Mahabharata y a los Brahma Puranas. La leyenda se refiere a la diosa Sati, hija de Daksa y esposa de Shiva. Cuando Daksa se negó a invitar a Shiva y a Sati a un sacrificio, Sati fue sin invitación al sacrificio y se suicidó allí. Como resultado, Shiva se enfureció, mató a Daksa y destruyó el sacrificio. Llevó el cuerpo de Sati al hombro y bailó de una forma que amenazaba al universo. Para detener la danza de Shiva, los dioses hicieron que el cuerpo de Sati se desintegrara, haciendo que las partes de su cuerpo cayeran al suelo.
Los Upanishads son textos védicos en sánscrito sobre las enseñanzas e ideales hindúes. Los Upanishads forman parte de la literatura Shruti y se consideran de origen divino. Los estudiosos difieren sobre el número de Upanishads y lo que constituye un Upanishad, pero muchos creen que hay 108 de estos textos antiguos, lo que otorga a este número un significado sagrado.
108 y el alfabeto sánscrito
El alfabeto sánscrito es también parte de la razón por la que este número es tan importante en el yoga. El alfabeto sánscrito consta de 54 letras. Cada letra del alfabeto tiene una energía masculina (Shiva) y una energía femenina (Shakti). 54 multiplicado por estas dos energías es 108.
Los 108 puntos Marma cubren todo el cuerpo humano
Los puntos marma son una intersección en el cuerpo donde se encuentran dos o más tipos de tejidos, pero son mucho más que eso. Los puntos marma son puntos en los que se cruzan la fuerza vital y el prana o la respiración. Se cree que estos puntos albergan los tres doshas ayurvédicos, Vata, Pitta y Kapha. Estos puntos de energía vital en todo el cuerpo son otra razón por la que el número 108 es tan sagrado.
108 de estos puntos cubren el cuerpo humano, y los principales puntos marma corresponden a los siete chakras o centros energéticos del cuerpo. Tradicionalmente, los puntos marma se agrupan en 3 categorías: los de los pies y las piernas, Sanakha Marma, los del torso, Madhayamanga Marma, y los del cuello y la cabeza, Jatrurdhara Marma.
La existencia de estas regiones vitales demuestra que el cuerpo no es una simple masa, sino un campo energético complejo con puntos de poder mediante los cuales podemos controlar los procesos fisiológicos y psicológicos.